El equipo azulgrana se tomó la revancha de la derrota en la final del año pasado jugando un encuentro extraordinario en defensa y ataque, basado en dos de sus piezas claves: el bielorruso Shiarhei Rutenka, una pesadilla para la defensa germana y que sumó ocho tantos, y el meta bosnio Daniel Saric (17 paradas) impecable bajo los palos.
El Renovalia Ciudad Real selló su pase, por segunda temporada consecutiva, a la 'Final Four' de la Liga de Campeones pese a perder en el Quijote Arena contra el Flensburg alemán por 21-22.
La goleada a domicilio que firmó el equipo manchego en la ida de los cuartos de final (24-38), el 21 de abril, restó trascendencia a una eliminatoria que se resolvió en Alemania.
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